El amor de Gustavo Mirabal, por las leyes y los caballos, tiene origen en las pasiones de su señor padre: Gustavo Mirabal Bustillos. El padre fue miembro del Congreso de la República, Ministro de Fomento y Gobernador del Estado Miranda. Así mismo, fue propietario de Tropigold, un caballo campeón de los años ochenta. Quizás por su experiencia y éxito en el mundo ecuestre le encomendaron la presidencia del Instituto Nacional de Hipódromos a finales de esa década (80).
Gustavo Mirabal nace pocos años antes que el éxito ecuestre alcanzara a la familia Mirabal. A los 9 años su padre lo llevó por primera vez a los establos, para que tuviera contacto directo con los caballos. Allí descubrió una vocación para toda la vida.
Un año después participó en su primera competencia ecuestre. La misma se realizó en el Club La Lagunita, uno de los más distintivos de Venezuela. A los 15 años vive la experiencia con el caballo campeón Tropigold.
Tropigold nació el 20 de febrero de 1978 en el Haras Varsego. Fue vendido al Stud Trabucazo para defender los colores de la bandera venezolana. Era hijo del campeón McKenna’s Gold y una yegua argentina. Consiguió ser Campeón Dosañero de 1980 con su gran cosecha de éxitos.
Una lesión descubierta tardíamente le impidió ser el ganador de la triple corona nacional a los tres años. Posterior a su recuperación Tropigold siguió corriendo y cosechando éxitos un poco más irregulares pero imponiendo siempre respeto por su presencia en la hípica nacional. Su campaña culminó con 15 actuaciones y 11 victorias. Un total en premios de 3.420.405 Bs. una verdadera fortuna para la época.
La pasión de Gustavo Mirabal había quedado marcada en los años ochenta y solo hacía falta que se mezclaran las condiciones adecuadas. Es por esto que, a través de los recursos económicos, contactos en el mundo ecuestre y una pasión de generaciones se conjugaron para que naciera un proyecto maravilloso.
Gustavo Mirabal inicia en el Hatillo (Venezuela) una instalación de cría de caballos con la que resultó exitoso. Luego se traslada a Florida y en el año 2009 funda durante el festival ecuestre de invierno, la empresa G&C Farm. Llevando a lo más alto la bandera venezolana. Vale destacar, que el G&C Farm se convirtió durante 10 años en referencia en cuanto a instalaciones élite para las competencias ecuestres de salto y formando campeones de la talla de G&C Don Vito, G&C Unicstar, G&C Arrayan, G&C Close Up y G&C Wolf.
La mayor alegría de Gustavo Mirabal en G&C Farm, fue la victoria de G&C Arrayan en el gran premio de Cannes. Este logro fue presenciado junto a su hijo y esposa. Mientras la pareja festejaba saltando de alegría, su pequeño hacia lo propio, sin saber muy bien lo que ocurría. Una enorme alegría, el éxito de años de trabajo duro, compartido con los seres queridos, no tiene precio.
En marzo de este año Gustavo anuncia el cierre de G&C Farm. Dejando este negocio pues se retiraba de las competencias ecuestres amateur. Manteniendo el amor por los caballos retuvo algunos de los mismos, en sociedad con el reconocido Sergio Álvarez Moya. El resto de los caballos los vendió para que siguieran el camino. Estos animales han dejando en alto el nombre de Venezuela y de la familia Mirabal.
Fuentes consultadas
http://www.anecdotashipicas.net/Criollos/Tropigold.htm
http://www.worldofshowjumping.com/en/News/Gustavo-Mirabal-bids-a-grateful-farewell-to-G-C-Farm.html#
http://boletindiario.net/gustavo/mirabal/castro/g/c/farm/disney/ecuestre/global/caballos
https://gustavomirabalcastro.online/2018/11/04/gustavo-mirabal-y-su-granja-ecuestre/
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