Inmunidad-Caballo-Alimentación-Gustavo-Mirabal
El ambiente está lleno de bacterias, virus y otros microorganismos que pueden incidir negativamente en la salud del caballo. A su vez, los factores de estrés como el dolor crónico, los viajes de larga distancia o los cambios ambientales pueden afectar la inmunidad del equino. Sin embargo, a través de la alimentación podemos contribuir a mejorar significativamente la respuesta inmune del animal.
El pasto suministra al caballo de muchos nutrientes importantes, como vitaminas E, A y C. Vale destacar, que las gramíneas también son ricas en ácidos grasos omega-3.
Por otra parte, mientras que el acceso libre a los pastos frecuentemente suministra todos los nutrientes que un caballo en mantenimiento requiere para mantenerse saludable. Muchos caballos dependen del heno como su principal alimento durante el invierno. Sin embargo, el heno pierde parte de sus vitaminas y ácidos grasos durante su almacenamiento. Es por ello, que los caballos al consumir sólo heno por más de tres o cuatro meses pueden necesitar un suplemento adicional.
Si un caballo presenta signos que evidencian inmunidad debilitada (infecciones respiratorias, tos y fiebre, aftas recurrentes, infecciones bacterianas, fiebre, reacciones alérgicas, y malestar general), es el momento oportuno de aumentar los nutrientes en la dieta.
Es un poderoso antioxidante. Los antioxidantes resguardan contra las enfermedades mediante la neutralización de los radicales libres que el estrés mental y físico produce. No olvidemos que los radicales libres son moléculas que dañan con un electrón inestable no apareado que extrae electrones de otras moléculas.
Expertos a través de diversas investigaciones encontraron que los caballos suplementados con vitamina E, eran más capaces de combatir las bacterias. Además que producían mayor cantidad de anticuerpos. La vitamina E natural es más eficaz como un refuerzo del sistema inmune que la vitamina manufacturada. No obstante, la forma sintética es más estable y, por lo tanto, tiene una mayor vida útil.
Es necesaria para la regeneración normal de las barreras mucosas dañadas por la infección. A su vez, mejora la función de los neutrófilos, macrófagos, y células asesinas naturales.
En este orden de ideas, las plantas contienen beta caroteno, que el cuerpo utiliza para producir vitamina A. Así mismo, el beta caroteno, la vitamina E, vitamina C y el trabajo en sinergia sirve para reducir la inflamación. También protegiendo los lípidos de las membranas celulares contra los efectos dañinos de los radicales libres.
Esta vitamina se encarga de neutralizar los radicales libres a través de su capacidad de donar electrones. El hígado del caballo normalmente sintetiza la vitamina C en cantidades más que suficientes y es excretada durante los períodos de estrés prolongado.
Reducen la inflamación, así como la respuesta inflamatoria alérgica en otras especies.
Aproximadamente el 8% de la dieta de un caballo debe incluir proteína. Recordemos que una proteína de alta calidad posee todos los aminoácidos esenciales. Esto permite que el sistema inmune produzca anticuerpos y enzimas.
Fuentes consultadas
https://www.engormix.com/equinos/articulos/alimentacion-inmunidad-equinos-t30531.htm
https://gustavomirabalcastro.online/salud/sistema-digestivo-del-caballo/
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